lunes, 22 de febrero de 2021

LA LEY DE ATRACCIÓN

LA LEY DE ATRACCIÓN
LA UTILIDAD Y BENEFICIO
DE APLICARLA EN NUESTRA VIDA

En cualquier parte del mundo que estemos, sea Lima, Londres, París, etc., todos trabajamos bajo el mismo poder de la atracción: todo lo que a tu vida llega es porque tú lo has atraído a través de las imágenes que tienes en tu mente y a través de tus pensamientos.
Prentice Mulfort, nos dice: “Cada uno de tus pensamientos es un objeto real, una fuerza, así que debemos de tener mucho cuidado con lo que pensamos”. Si tienes pensamientos negativos como odio, rencor, cólera, atraerás más pensamientos negativos y te cargarás de ellos hasta hacerte el mayor daño posible.
El doctor Bob Proctor, en una audaz propuesta de pensamiento nos dice: “Si lo ves en la mente lo tendrás en la mano”; ello porque los pensamientos se materializan en objetos.
Para Joe Vitale, “nuestros pensamientos envían una señal magnética que atraen hacia ti una señal paralela. El pensamiento o actitud mental que predomina es como un imán que atrae la señal semejante”.

Asimismo, para Bob Doyle, “a la ley de atracción no le importa si tu percibes algo bueno  o malo; si lo quieres o no lo quieres. Sólo responde a tus pensamientos, de modo que si estás contemplando tu montaña de deudas y si te sientes mal  por ello, esa es la señal que estás emitiendo al universo: ‘me siento fatal por todas las deudas que tengo’. Lo estás afirmando a ti mismo, lo sientes en todos los planes de tu existencia. Por lo tanto, obtendrás más de lo mismo.”
Michael Bernard Beckwith, señala: “Cada vez que alguien tiene un pensamiento o piensa prolongadamente de una manera, se está produciendo un proceso de creación en su mente y algo se manifestará de esos pensamientos”.
Por ello, la importancia que debe tener en nosotros cuidar que nuestra mente sólo genere pensamientos positivos. Estos son mucho más poderosos que nuestros pensamientos negativos. Tenemos que elegir los pensamientos positivos cuidadosamente, de tal manera que tu vida se convierta en una obra maestra y tú seas el principal ejecutor de esa obra.
Uno ejercicio básico para conseguir una mente positiva es la meditación. A través de ella silencias tu mente, ayudándote a controlar tus pensamientos y revitalizando tu cuerpo. Este ejercicio lo debes practicar por lo menos diez minutos cada día.
Es a través de nuestros sentimientos que podemos expresar lo que pensamos. Observa tus sentimientos ante los diferentes eventos de tu vida. Por ejemplo, observa qué pasa en tu interior si, de pronto, el carro en el que vas, pasa por un bache o si te han dado malas noticias, y vas a sentir una sensación en el estómago o en el plexo solar instantáneamente.
Tus sentimientos son una señal inmediata para saber en qué estás pensando. Según el manejo de tus buenas emociones y sentimientos percibes, cuando te sientes bien, el entusiasmo, la felicidad, la gratitud, el amor. ¡Imagínate si pudieras sentir esto todos los días. Los especialistas en la conducta humana, nos señalan que si te sientes bien, estas creando un futuro que seguirá las sendas de tus deseos; si te sientes mal estás creando un futuro que se desviará de la senda de tus deseos. Cuando te sientes mal, el universo se está comunicando contigo y te está diciendo ¡atención, cambia tu manera de pensar, elige pensamientos positivos!, y llegaran buenos sentimientos y buenas emociones.

El doctor Charles Haanel explica: “No hay mejor poder en el universo que el poder del amor. El sentimiento del amor es la frecuencia más elevada que puedes emitir. Si pudieras amar a todas las personas y cosas de la misma manera, tu vida se transformaría”.
Es importante señalar que, dentro del conocimiento humano, se ha logrado establecer la Ley de Atracción como un factor importante en el desarrollo del ser humano. De tal manera que, en la práctica, esta búsqueda científica se va reencontrando con el conocimiento del mundo espiritual enunciado en la Biblia.
Dentro de ella se encuentran principios que van siendo reafirmados a medida que la ciencia humana los va encontrando. Es por ello importante mantener una mente positiva y, sobre todo, tener la fe necesaria para conseguir un desarrollo personal que nos permita vivir en armonía con nosotros mismos, con nuestro ambiente y con los demás seres.